Publicado en: 28 de junio de 2016 – 17:52

Debido al fuerte crecimiento económico y a un estilo de vida cada vez más sedentario, Chile experimentó un espectacular aumento de la obesidad y los consiguientes problemas de salud en tan sólo unos años. Desde el lunes 27 de junio, las empresas están obligadas a colocar una advertencia en sus productos que contengan un contenido demasiado alto de azúcar y grasas saturadas.

Sin embargo, no fue fácil aprobar esta nueva ley dada la fuerte presión de las empresas multinacionales. Una presión que el senador Guido Girardi denuncia con vehemencia: “ Quienes dañan a los niños en el siglo XXI son aquellas corporaciones multinacionales que los engañan, que no respetan sus derechos y su integridad física y psicológica, abusando de su credibilidad. ¿Deberíamos someternos a estas empresas que se han dedicado a la publicidad engañosa durante décadas, que no dicen la verdad y que son responsables de una pandemia mundial de obesidad, cáncer y accidentes vasculares? ¿O deberíamos tomar medidas para garantizar que la gente esté adecuadamente informada? »

Con la nueva ley, 8.000 productos tendrán que comprobar su etiquetado para advertir a los consumidores de los peligros de una dieta demasiado salada, demasiado dulce o demasiado grasa. Muchos de ellos ya no pueden venderse en las escuelas y está prohibida la venta de juguetes con bandejas de comida o dulces. El italiano Ferrero, objetivo directo, amenazó con recurrir a la justicia internacional para defender sus huevos sorpresa.