ROMA, 1 de abril (askanews) – El telescopio del Observatorio Estratosférico de Astronomía Infrarroja (SOFIA) de la NASA llegó a Chile para estudiar galaxias. Es el primero en América del Sur y tiene la tarea de observar las Nubes de Magallanes, dos pequeñas galaxias que orbitan alrededor de la Vía Láctea y que solo son visibles desde el hemisferio sur. El enorme Boeing 747SP con el poderoso telescopio a bordo, computadoras, instrumentos científicos y una tripulación de 20 astrónomos e ingenieros aterrizó en Santiago de Chile hace unos días y ya completó ocho largos vuelos. Despega de noche y vuela a una altura de 12.000 o 13.000 metros, tiene un orificio en el fuselaje a través del cual el telescopio observa la emisión de polvo o gas con frecuencias infrarrojas. Las imágenes luego se toman en la computadora, se procesan y analizan, luego se estudian durante años.” Ezequiel Treister, astrónomo de la Universidad Católica de Chile: “El telescopio está en constante movimiento, por ejemplo, tiene que compensar la turbulencia, y también es muy diferente en ese sentido que el telescopio apunta con el plano, la posición del plano permite que el telescopio mire al cielo, y todo esto lo hace único, un reto científico y técnico. “SOFIA ya ha descubierto la primera molécula que se formó después del Big Bang y el año pasado también agua en la superficie de la Luna”. Ed Harmon, Jefe de Operaciones de la Misión SOFIA: ups 3.54-4.09 “Este es un avión de 1970 que está muy modificado para mantener este observatorio tan complejo con cuatro o cinco vuelos a la semana, creo que es uno de nuestros mayores desafíos”. El primer vuelo de SOFIA data de mayo de 2010.
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