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En Chile aún falta mes y medio para el referéndum obligatorio del 4 de septiembre: “sí” o “no” a la nueva constitución. Según encuestas recientes, el “No” podría prevalecer y el país podría entonces mantener la actual constitución redactada bajo la dictadura. El presidente Gabriel Boric, que apoya el nuevo texto constitucional, se prepara para esta eventualidad. En una entrevista televisiva esta semana, dijo que si la nueva constitución fuera rechazada, “todo tendría que empezar de nuevo”.
con nuestro corresponsal en Santiago, Naila Derroisne
Gabriel Boric anticipa y proyecta después del referéndum. Si se rechaza la nueva constitución, “se necesitarán nuevas elecciones para elegir una nueva asamblea que redacte un nuevo texto constitucional”, dijo. Y su argumento es que Chile votó muy claramente en el primer referéndum de octubre de 2020 por una nueva constitución votada por los ciudadanos.
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Varios miembros de su sector han criticado su anuncio, considerando sólo un posible resultado del referéndum: la aprobación del nuevo texto constitucional. Un miembro de la coalición presidencial dijo que “lo que hay que hacer hoy es ser más concreto sobre la introducción de la nueva constitución, en lugar de seguir considerando escenarios ficticios”, enfureció.
Por su parte, la oposición acogió muy positivamente las palabras del presidente, ya que la derecha en realidad se opone a la nueva constitución y, por lo tanto, considera “razonable” y “realista” que el gobierno se prepare para esta eventualidad.
Los dos bandos aún tienen siete semanas para convencer a los indecisos, pues tres de cada diez chilenos aún no saben a qué votarán. siguiente 4.9.
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