Los primeros litros de gasolina sintética obtenida combinando hidrógeno verde con dióxido de carbono atrapado en la atmósfera fueron producidos en Chile el martes en una fábrica pionera en el mundo, dijeron las autoridades chilenas.

“Este es un evento histórico. El combustible neutro en CO2 se produce aquí (…) Ninguna otra fábrica en el mundo puede hacer eso hoy”, aseguró el ministro de Economía chileno, Nicolás Grau.

El ministro de Energía, Diego Pardow, y ejecutivos de HIF Global, Porsche, Enel Green Power y Siemens Energy también asistieron a la ceremonia de puesta en marcha de la primera planta de “combustible verde” a base de hidrógeno.

Los primeros litros de este combustible, producido en una fábrica de Punta Arenas (a unos 2.200 kilómetros al sur de Santiago), fueron vertidos en el tanque de un Porsche 911 Carrera.

Un combustible neutro en CO2

“Esta planta utilizará viento, agua y captura de carbono para producir combustible, un combustible completamente neutro en carbono. Estamos muy orgullosos del liderazgo de Chile en esta área”, agregó Grau.

Este “e-combustible” se obtiene mezclando hidrógeno verde y dióxido de carbono (CO2).

El primero se obtiene del agua mediante un proceso de electrólisis (separación de hidrógeno y oxígeno). En este caso, la electricidad requerida es generada por aerogeneradores gracias a los fuertes vientos que soplan constantemente en la Patagonia chilena.

El CO2 se separa al medio ambiente mediante filtración. Al combinar los dos, un proceso de síntesis crea metanol, que se utiliza para producir gasolina que puede usarse en cualquier vehículo.

La construcción de la fábrica comenzó en septiembre de 2021 y está previsto que la comercialización del combustible electrónico comience en marzo de 2023. El objetivo de la empresa chilena HIF, impulsora del proyecto, es tener seis fábricas en todo el mundo en diez años, suministrar cinco millones de automóviles y eliminar doce millones de toneladas de CO2 de la atmósfera al año.