Maël Rivard participará en el primer gran evento multideportivo de su carrera. “No sé qué esperar, pero no puedo esperar”, dijo antes de partir hacia Sudamérica.
“Allí adquiriré mucha experiencia”, añadió el joven de 22 años de Ottawa.
Y también espera ganar “al menos una medalla”.
Un objetivo que resulta realista. En mayo, Rivard ganó la plata en el Campeonato Panamericano Sub-23 en Brasil.
“Me dio una buena idea de qué esperar en Chile”, dijo.
Este último acaba de completar la temporada más activa de su joven carrera en los rápidos. El especialista en slalom participó en las cinco etapas del Mundial. Por no hablar del Campeonato Mundial.
“Regresé a casa hace poco. La temporada fue larga. Estamos en Europa desde julio”.
Anteriormente, Rivard estuvo de gira desde finales de abril hasta junio. En el programa estaban previstas competiciones y campos de entrenamiento.
“No todo el mundo entiende que no me iré de vacaciones hasta dentro de tres meses. El hecho es que todavía tengo la suerte de poder hacer esto”.
Sus maletas se seguirán utilizando mucho en los próximos meses.
Después de visitar Chile para los Juegos Panamericanos, Maël Rivard descansará unas semanas en Ottawa antes de viajar a Australia antes de Navidad. Le espera un campo de entrenamiento en el país de los canguros durante parte del invierno.
Esto sienta las bases para las selecciones olímpicas que tendrán lugar en Oceanía en febrero.
“Estoy luchando por una plaza en los Juegos de París. Pero va a ser realmente difícil”.
— Maël Rivard
En primer lugar, porque Canadá necesita garantizar una cuota de plazas. Luego, en la jerarquía del país, hay algunos kayakistas por delante de Rivard.
No hay que olvidar que, a su juicio, el deportista del club Coureurs de la rivière des Outaouais no ha hecho la mejor temporada.
Sí, ganó la plata en el Campeonato Panamericano Sub-23 en la primavera.
“La temporada fue difícil con varios contratiempos. Me había marcado varios objetivos. Y no pude alcanzarla. Fue difícil de aceptar. Al mismo tiempo, creo que aprendí mucho”.
Rivard debe poder “cumplir cuando llegue el momento”.
“Tengo que mejorar mi rendimiento. Ser capaz de hacer exactamente lo que necesito hacer la mañana de la carrera. Un poco como entrenar. No cometas errores”.
Lo cierto es que Maël Rivard es todavía muy joven en el panorama internacional.
“Hay muchos jóvenes a los que les está yendo bien, pero a menudo los atletas más exitosos tienen veintitantos o incluso treinta años. A medida que envejeces, puedes perder parte de tu fuerza física, pero adquieres mucha experiencia”.
Y Rivard se define a sí mismo como un tipo paciente.
“Tengo mucho que aprender. Las cosas se ponen difíciles cuando se quedan estancadas durante mucho tiempo. Pero cuando ves pequeñas mejoras, te animas a seguir adelante”.
¿Lo otro que será importante en su caso en los próximos años?
Su salud.
Sus hombros le vienen causando problemas desde hace varias temporadas.
Poco antes del Campeonato del Mundo de este año, donde finalizó 31º en K1, sufrió una dislocación de hombro.
“Tuve suerte. Conté con un buen fisioterapeuta. Me ayudó a ponerme en forma para el día de la carrera”.
El hecho es que Rivard está desesperado por poner fin a su dolor en el hombro.
“Esto no le pasa a todo el mundo. Todavía me queda trabajo por hacer de este lado para fortalecer mis hombros. Cada vez que me lastimo, hace un movimiento”.
¿Las buenas noticias?
Sus hombros parecen aguantar estos días en vísperas de los Juegos Panamericanos.
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